jueves, 24 de septiembre de 2009

La seguridad en los ralis

No todos los aficionados que siguen los ralis lo hacen desde una posición segura, en la que no pongan en peligro su integridad física. Las organizaciones de estas pruebas de velocidad intentan que los coches puedan hacer sus recorridos con el mínimo riesgo para el público, pero parece una tarea imposible. Ni los cuerpos de seguridad del estado consiguen evitar que se incumplan las normas de seguridad.
El pasado sábado 19 de septiembre se celebró el Rali de la Vendimia, la prueba automovilística con más nombre en Extremadura. En el tramo que transcurría entre Valle de Santa Ana y Salvatierra de los Barros, un Citröen Saxo tuvo un accidente y varios aficionados invadieron la carretera, por la que pasarían a continuación el resto de participantes, que no estaban alertados de la existencia de obstáculos en la carretera. El incidente se produjo a pocos metros de la curva en la que, ocho años antes, tuvo lugar un accidente que supuso la muerte de dos personas que fueron arrolladas por un participante del Rali de Jerez de los Caballeros. Afortunadamente, el sábado no pasó nada y sólo hay que lamentar que el público mostrara su euforia ante el morbo de ver un accidente. En la siguiente grabación de un videoaficionado se ilustra todo. Por cierto, en el vídeo hay una frase que no tiene desperdicio: "Muy bien, muchacho, que has sido el único que ha entrado con dos huevos ahí, sí señor", le dice alguien al piloto, que está recién salido de su coche siniestrado. Menuda oda a la velocidad.

0 comentarios:

Publicar un comentario